Año: 1990
Genero: Thrash/Death Metal
Line Up:
Tom G. Warrior: Vocals, Guitar & Bass
Martin E. Ain: Bass
Curt Victor Bryant: Guitar & Bass
Steve Priestly: Drums
2. Wine In My Hand (Third From the Sun) (3:29)
3. Wings of Solitude (4:36)
4. The Name of My Bride (4:32)
5. This Island Earth (5:50)
6. The Restless Seas (4:41)
7. Phallic Tantrum (3:29)
8. A Kiss Or A Whisper (3:05)
9. Vanity (4:26)
10. Nemesis (7:49)
11. Heroes (3:47)
Difícil comentar sobre un disco tan controvertido, quizá lo mejor que se pueda decir es que todos tienen derecho a la redención, y eso pasa con Celtic Frost al analizar este discazo luego de tantos años de ver la luz, luego del funesto Cold Lake, CF saca este disco, la fanaticada estaba mas que dolida y asqueada con el trabajo anterior y la aparente falta de punche, oscuridad y bestialidad de este disco fue imperdonable, así que lo relegaron al baúl del olvido y este es el mejor termino para este disco "olvidado", pero que tal error de esos años, pocos supimos apreciar la joya que había aquí, particularmente siempre ha sido un disco muy apreciado por mi, no es el mejor ni mucho menos es malo, simplemente es diferente, pero que tan diferente?, sus grandes trabajos anteriores, sobretodo los dos primeros, a veces son muy difíciles de escuchar, menos aun para los jóvenes metaleros, están en otra, así este disco sale de la penumbra y nos demuestra la maestría que solo estos dioses del metal podían tener, su visión, y es que este disco es atemporal, se puede escuchar hoy como ayer y seguramente mañana, siempre sera un toque de buen metal en un universo musical cada vez menos creativo e incierto, que tiene elementos dispares, sin duda, una voz femenina tosca, algunos hubieran preferido una mas operistica, error, esta es la voz ideal, las guitarras son fantásticas, potentes, grandes riffs y espectaculares solos, la voz ni hablar, y el bajo casi perfecto. Había que tener huevos para después de la debacle de un disco fallido, intentar otro que hasta un cover de David Bowie tiene, y es que el altar del metal exige sacrificios y solos los valientes los hacen sin dudar, discazo de principio a fin, canciones cañeras, a medio camino entre el thrash, death e incluso gothic, por que no, todo cabe en este disco, que es fácil de escuchar, lo es, no exige la concentración que los trabajos previos requieren, este no, hasta de fondo puede ponerse, pero no te confundas, nooooooo, no es cualquier disco, en otro grupo hubiera sido la cumbre y la gloria, en Celtic Frost fue su lapida, pero es tiempo de redención y resurrección, este es un disco imperdible, imprescindible diría yo, hay que escucharlos sin las taras o las ideas preconcebidas, olvidarse un poco de lo anterior, gran trabajo de estos dioses, si nunca lo escuchaste como debía ser, ponlo a todo volumen, no defrauda....................imperdible............